INGLEWOOD — En una gran pelea el ídolo de Nicaragua, el boxeador que es considerado como el mejor libra por libra del mundo, Román 'Chocolatito' González, logró un histórico triunfo al adjudicarse su cuarto título mundial, la faja de campeón de peso súper mosca del Consejo Mundial de Boxeo luego de destronar al mexicano Carlos Cuadras, este sábado en el Forum de esta ciudad californiana.
González mantuvo su condición de invicto mediante una decisión unánime de 117-111, 116-112 y 115-113, de acuerdo a la puntuación que entregaron los jueces, luego de 12 asaltos de un combate en que ambos contendientes cruzaron candela de principio a fin. El de Nicaragua, en este caso el retador, tomó rápidamente la iniciativa, después de un primer asalto sin mayores consecuencias luego de los primeros escarceos. Pero a partir del segundo giro, 'Chocolatito' empezó a hacer estragos en la humanidad de Cuadras, que intentaba responderle, mientras buscaba no representar un blanco fijo tratando de mantenerse a la distancia.
Para el tercer episodio, ya el rostro del mexicano evidenciaba el castigo recibido, especialmente, de la mano izquierda de González, quien llevaba totalmente la iniciativa mientras que el todavía campeón no hallaba donde meterse para evitar el castigo. El pómulo izquierdo de Cuadras ya empezaba a inflamarse desde esta instancia del combate y en el cuarto asalto, ya el sinaloense tan solo peleaba en reversa, debido a la fortaleza, la rapidéz y la contundencia de los golpes de su rival. Sin embargo en el siguiente giro, el de Guamuchil, Sinaloa, vivió su mejor momento, logrando conectar a su retador utilizando el jab de izquierda y el volado de derecha, logrando detener, por un momento, el paso arrollador de González.
El ojo izquierdo de 'Chocolatito' también estaba empezando a cerrarse y al finalizar el pleito, los estragos en el rostro del nuevo campeón de las 115 libras eran más notorios, en ambos pómulos, que los que mostraba el rostro de Cuadras al concluir el pleito. En el sexto, un hilo de sangre empezó a salir de la comisura del ojo izquierdo de Román, algo que no pasó a mayores, ya que el centroamericano seguía llevando la iniciativa, a pesar de que por un momento Cuadras lucía un poco mejor, esgrimiendo su jab de izquierda y lanzando ráfagas de golpes con ambos puños.
Los gritos de México y de Nicaragua explotaban en el inmueble de las calles Manchester y Praire, colmado por 6,174 espectadores en su configuración íntima, mientras los dos gladiadores hacían alarde de una inmejorable condición física entregados cada uno a lo suyo, lanzando lo mejor de su repertorio. El retador seguía hacia adelante, lanzando metralla y Cuadras se mantenía en reversa, intentado eludir los golpes de González, pero tratando de concretar lo suyo, mientras que la pelea se iba haciendo adulta. Cuadras seguía haciendo un pelea a la defensiva, con movimientos de cintura para tratar de esquivar los golpes del retador y de vez, en vez, lograba sorprender, principalmente, con su volado de derecha al rostro del centroamericano.
El mexicano intentaba siempre cerrar cada episodio lanzando buenas combinaciones, para tratar de impresionar a los jueces. Algo que, como se demostró al final, no pudo conseguir.
En el undécimo round, 'Chocolatito' se lanzó con todo, intentando terminar ahí mismo el combate, pero el mexicano logró sobrevivir el episodio y al final del mismo, se vió a un Román un tanto agotado por el esfuerzo realizado. El último asalto fue de alarido, de candela pura. Ninguno de los dos contendientes se guardó nada, entregándose por completo, buscando sumar los puntos para inclinar la balanza a su favor, en medio de un griterío ensordecedor y de una ovación que premió el esfuerzo y la entrega de ambos contendientes. Cuadras, que perdió su condición de invicto, deja su marca en 35-1, con 27 de sus triunfos por la vía corta, mientras que 'Chocolatito' mejora a 46-0, incluídos 38 nocauts.
Por Rigo Cervantez | ESPN
