RÍO DE JANEIRO – El espíritu olímpico invadió por completo la pista del estadio de atletismo durante el segundo heat eliminatorio de los 5,000 metros femeninos, disputados este martes por la mañana en Río.
La corredora de Nueva Zelanda Nikki Hamblin se enredó y cayó en la pista mientras se desarrollaba la carrera; la norteamericana Abbey D’ Agostino se enredó también con Hamblin y terminó en el piso al igual que su rival en la prueba. Hambling se quedó en el suelo, desconcertada, tratando de entender qué había sucedido, cuando sintió la mano de D’ Agostino en su hombro. “Levántate, levántate, tenemos que terminar”, le dijo D’ Agostino. “Son los Juegos Olímpicos, tenemos que terminar la competencia”.
D’ Agostino ayudó a Hamblin a levantarse y las dos continuaron corriendo. D’ Agostino se lastimó la rodilla en la caída y no estaba corriendo de forma normal; cuando Hamblin volteó a ver en qué podía ayudarla, la estadounidense simplemente le dijo: “Continúa, continúa”. Ambas se abrazaron después de terminar (Hamblin con un tiempo de 16:43 y D’ Agostino en 17:10), a pesar del pobre final de la competencia, las dos avanzaron a la final.
D’ Agostino no pasó por la zona mixta para hablar con los reporteros por su lesión en la rodilla, pero Hamblin que sí habló con la prensa, solo tuvo palabras de eterna gratitud para la corredora que justo acababa de conocer. “Estoy muy agradecida que de Abbey me haya ayudado”, dijo Hamblin. “Esa chica es el espíritu olímpico presente aquí mismo, estoy muy impresionada y me siento inspirada por esto”, agregó la atleta.
Por Jim Caple, ESPN
