Dos golfistas surcoreanos no profesionales fallecieron el pasado 27 de diciembre en Tailandia mientras disputaban una ronda con sus respectivas mujeres en un trazado del país asiático, en el que se encontraban por motivos turísticos. En un trágico accidente que ha dado la vuelta al mundo (medios internacionales como la CNN lo han recogido en sus ediciones digitales),
Sung Jun-yong, de 68 años, y Ha Jae-oong, de 76, se disponían a cruzar, a bordo de sus buggys (los vehículos que los golfistas pueden utilizar para desplazarse por el campo de juego con sus bolsas si no quieren hacerlo a pie) y en ferry, el río Nan, que atraviesa el campo en el que jugaban.
Detrás, en otro buggy, se colocaron sus respectivas esposas. En un momento dado, aún cruzando el río, el buggy de ellas se desplazó e impactó con el que ocupaban ellos, precipitándose ambos a unas aguas en condiciones pantanosas, según informó la agencia AFP.
Entonces, el empleado del campo que conducía el segundo vehículo intentó sacar del agua a ambos varones, mientras un pescador que faenaba cerca rescataba a las mujeres. Los intentos del primero fueron infructuosos, pues la corrientes arrastró a ambos varones río abajo, donde fueron encontrados sus cuerpos sin vida en días distintos, martes y jueves, de la pasada semana.
AS
